abierto del queso y el champán, día 9

Quedan 8, pero Agatha Christie se equivocó. El único negrito que quedaba perdió contra mi pollo Djokovik (¿será serbo o montenegrino?) en tres sets cerrados, un partido de los más lindo.

Fueron lindos los partidos que ofreció la cuarta rueda de esta Roland Garros.

Federer impuso su experiencia ante Thomas Berdych y le ganó en tres sets sin darle demasiadas chances al joven checo. Sólo en el principio del tercer set Roger se amilanó un poquito, cedió su único juego de saque y quedó 0-3, pero luego se embolsó seis games al hilo para quedarse con el partido. Su rival, mañana, será el croata Ancic.

En un partidazo muy cambiante, Ancic venció a Tommy Robredo. Los dos tiraron palos de todas partes y aunque intercambiarbiaron aciertos y errores la justicia poética determínó que el ganador fuera el que más arriesgó y, por consiguiente, erró. Ahora, Croacia tiene 2 jugadores entre los 8 mejores.

Porque Ljubicic venció sin demasiados problemas al español Ramírez Hidalgo, de muy buena temporada pero que, se notaba, estas instancias le quedaban grandes. Al pelado le alcanzó con jugar y hacer jugar para ganarse un lugar en 4tos. Su rival será el local Julien Benneteau, que tendrá la ventaja de haber transpirado poco ante Alberto Martín, que se retiró antes del final del primer set. Si a eso le sumamos que el croata viene de jugar un partido larguísimo y en dos días ante Pico Mónaco, Benneteau tendrá un interesante capital para explotar el miércoles y ganarse un lugar para las semis.

Gaudio perdió contra Davydenko porque se fue del partido en el momento menos oportuno. Ya habíamos dicho que al ruso no hay que dejarlo ganar y que la cosa estaba en manos de Gaudio. Pero el argentino se fue del partido luego de quebrar para 3-4 en el primer set y no volvió hasta 6 games más tarde. Conclusión set abajo y 0-4, medio partido al tacho. Lo de Gaudio fue mejor de ahí en adelante, pero el daño ya estaba hecho. Aunque repuntó, no pudo rescatar el segundo set. El tercero se lo quedó con autoridad y el oportunismo de Davydenko en el cuarto set terminó con el sueño del argentino, al que veo cerca del retiro -ojalá me equivoque.

Davydenko enfrentará mañana a David Nalbandian que derrotó con sobriedad a Vassallo Argüello. El favorito, sin dudas es el argentino, que tiene un volumen de juego mucho más interesante que el ruso, mejores ángulos y una cabeza más sólida. Se enfrentaron hace poco, en la final de Estoril sobre esta superficie y Nalbandian ganó cómodo 6-4 -6-3. Antes, la paliza en el masters de Shangai, por 6-0 y 7-5. En el historial hay 3 a 2 a favor del cordobés, pero la última victoria del ruso fue hace más de 3 años.

El cuarto lugar en semis lo decidirán los ganadores de los dos partidos más lindos de la fecha.

Nadal venció a Hewitt en un partidazo etre los jugadores que más corrieron en el circuito en los últimos años -a ellos dos habría que agregarle a Willy Cañas-. Finalmente se impuso la lógica en 4 sets y Nadal sigue a paso firme. Ahora le toca Djokovik, que aunque tenga menos de 20 años es un jugador completo e inteligente, como lo demostró esta mañana al vencer a Monfils, que a su vez demostró que, en la carrera por ser la gran promesa francesa, le saca varios cuerpos a Gasquet.